La justicia española es un cachondeo. Eso lo sabemos todos. Pero aun sabiéndolo, siempre consigue sorprendernos.
En España puedes violar a una retrasada, pasarle con el coche por encima y pegarle fuego después para rematar la faena, si te faltan unos meses para los dieciocho, te vas a un correccional y después a la calle. Puedes dejar millones de euros en deudas, arruinar empresas y provocar el despido de trabajdores y salir impune.
Pero... si eres un niño obeso, muy obeso, puede venir el coco ( justicia) y llevarte en contra de tu voluntad y la de tus padres a un centro de acogida. ¡Quééeeeeee!¿? Síiiiiiii, a un centro de acogida por gordo. NO importa que en la obesidad haya factores genéticos, no importa que nadie haya demostrado el efecto beneficioso de dicho centro de acogida sobre la obesidad ( o la felicidad del infante), no importa: Niño gordo, castigado al centro de menores, la misma pena por comer bollycaos que por violar y matar.
Muy bien señores jueces, muy requetebien. Ya han empezado por ahí. Y después, no se detengan, sigan con los niños que no comen, y depués con los mimados y maleducados.... no se detengan, el estado los meterá a todos en solfa.
Y... si a algún niño se le detecta desviación en su orientación sexual, separenlo también de su familia a ver si se corrige. Ánimo en la heroica tarea que les ha sido asignada
